“El conocimiento puede ser de dos
especies: o bien conocemos un tema nosotros mismos, o bien sabemos donde
encontrar información sobre él”
(Samuel Johnson)
Desde
hace muchos años, el conocimiento es considerado como el factor fundamental
para el logro del desarrollo cognoscitivo de las diversas sociedades mundiales,
lo cual ha sido mayormente estudiado y por ende acentuado, desde los años
ochenta, formulando con ello diversas teorías y paradigmas que han hecho
posible la evolución de dichas sociedades, lo cual se encuentra estrechamente
relacionado tanto con los sistemas económicos como con los sistema políticos de
los países mas desarrollados, sin dejar pasar por alto que tanto la ciencia
como la tecnología, en buena medida, son un tópico que no puede dejarse a un
lado en este tema.
La
llamada “sociedad del conocimiento” ha sido considerada primeramente como un
clásico de la sociología del siglo XIX, la cual posee un sistema de
triangulación teórico-social-político de grandes criticas intelectuales pero de
innumerables desarrollos y/o aportes al conocimiento científico como tal.
En la
actualidad, se considera como un pionero en cuanto a aportes influyentes en
este particular a Peter Drucker, quien en 1959 introduce la forma de ilustrar y
demostrar los cambios en las sociedades de dichos años, y que a su juicio, era
un factor preponderante para su desarrollo; es por ello que menciona que ha
habido cambios significativos en los efectos del saber, ya que desde aquellos
años se podía establecer lo que hoy en día se conoce como estructuras
jerárquicas organizacionales, es decir, la organización de personas con
conocimientos, pericias y sabiduría en esquemas o posiciones puntuales,
logrando con esto que el individuo se convierta en el RECURSO MEDULAR DE LA SOCIEDAD (Drucker,
1959:216).
La
sociedad del conocimiento, define diversos elementos que favorecen el trabajo
efectivo o productivo, tal es el caso de la convergencia tecnológica, la innovación,
la inmediatez, la globalización, entre muchos otros, los cuales permiten
aplicar visiones, saberes y conceptos que se basan en modelos conceptuales y no
en modelos físicos (de mano), factores que día a día ponen de manifiesto la
constante evolución de la humanidad, quien no ha podido mantenerse al margen de
estos cambios, por lo que ha estado modificando sus formas y estructuras
para adecuarse a las necesidades sociales.
El paradigma de la sociedad del conocimiento
Cuando se habla de paradigmas,
se habla de ejemplos estructurados y esquematizados, modelos y/o referencias
que servirán epistemológicamente para comprender el origen y significado de
algún elemento de estudio, es por ello entonces que el paradigma de la sociedad
del conocimiento viene a representarse como una medida de reacción durante los
años ochenta y noventa cuando se afianzó la creencia de que los países pobres
debían centrar sus esfuerzos en la educación básica, delegando en otras
instancias de gobierno los agentes sociales, económicos y políticos.
Es así
como poco a poco se van desarrollando estrategias mundiales en cuanto a la
génesis de la división de trabajo, para lo cual era necesario realizar grandes
inversiones en cuanto a las investigaciones y evolución propia de las mismas,
retribuyendo con ello el pago de patentes, licencias y/o marcas registradas.
La
sociedad del conocimiento viene a ser entonces un modelo básico y satisfactorio
para todos, ya que reconoce desde sus inicios que la humanidad tiene la
responsabilidad y cada una de sus generaciones, de desarrollar tecnologías e
innovaciones apropiadas a cada una de las regiones o realidades locales, lo
cual sin lugar a dudas, favorece al desarrollo nacional.
Ahora
bien, si bien es cierto que es necesaria una mano de obra lo suficientemente
calificada como para proveer a un país de constantes evoluciones, no es menos
cierto que en muchos países esta mano de obra difícilmente logra ser de alto
nivel calificativo, lo cual generalmente se asocia a todos aquellos sistemas
económicos de gananciales bajos, con productos internos brutos de baja
incidencia y con políticas de gobierno desacelerada en comparación con países
desarrollados, es aquí cuando se evidencia entonces la fuga de los pocos
ingenios que un determinado país puede tener, buscando éstos mejores
condiciones de vida, que en muchos casos, en sus países de origen, no logran
obtener, realizando cuantiosas inversiones en materia de educación se
refiere.
Vemos entonces como los nuevos sistemas
sociales buscan constantemente una integración tecnológica curricular, logrando
con esto un desarrollo asertivo tanto del individuo como del facilitador como
tal, es bien, una condición de retroalimentación continua, sin embargo, en este
aspecto, se abre la brecha en lo que concierne a la sociedad de la información,
la cual esta dejando poco a poco a un lado a la sociedad del conocimiento, por
lo que no solamente es relevante disponer de la información, sino también de la
generación del conocimiento propio.
En la sociedad del conocimiento, tanto las
comunidades, empresas y organizaciones avanzan hacia la aplicación y
sistematización de conocimientos creados tanto a nivel local como a nivel
exterior; día a día el aprendizaje se potencia entre comunidades y países,
logrando establecer naciones u organizaciones con agentes económicos
competitivos e innovadores.
En este
aspecto, la tecnología ha sumado grandes aportes a nuestras sociedades
modernas, tal es el caso del proceso de globalización como tal, el libre acceso
a la información, quien en conjunto con las TIC, mejoran notablemente la
formación de colectivos o comunidades que hasta pudieran estar en desventaja en
comparación con otros, por su parte la sociedad del conocimiento entonces, esta
cambiando el desarrollo y la practica tanto científica como profesional, por lo
que deben disponerse de recursos y medios relacionados con la educación. Se
debe pasar la transmisión de conocimientos a su propia construcción, analizar
las mejores prácticas e integrarlas en la actualidad a los diversos currículos
estudiantiles, existiendo la explicación continua y el acompañamiento entre las
técnicas y su implementación en los diversos campos de la sociedad.
La diversidad disciplinar y la unidad
intrageneracional.
Enfatizando la visión en cuanto a la
conceptualización de este epígrafe, se hace referencia que tanto la visión
disciplinar como la intrageneracional, juegan un papel importante en el
entendimiento y desarrollo de la sociedad del conocimiento, esto motivado a la
relación de acontecimientos generacionales que han sucedido en años anteriores
a la que actualmente vivimos -por ejemplo-, lo que trae a acotación las
diferencias entre los modelos de aprendizaje, el tipo de conocimiento que antes
era desarrollado, las condiciones sociales, económicas, tecnológicas, entre
otros, los cuales ponen de manifiesto la evolución continua en cuanto a estos
elementos.
La suma
de conocimientos de cada una de las décadas o generaciones por las cuales ha
transitado (aún sin conocerse o manifestarse de forma científica) la sociedad
del conocimiento, no es más que la suma acumulada en el tiempo, de todas aquellas
habilidades, técnicas y tecnologías que han configurado esquemas sociales y
organizacionales y cuyos cambios han sido acelerados entre los años ochenta y
noventa, son retos que han permitido visualizar el reflejo de transformación
generacional en nuestros tiempos.
Si bien
se indica que a través de los años todos estos cambios se han puesto de
manifiesto, no es menos cierto que tratar de integrar estos cambios en
individuos que han sido desarrollados laboralmente en otras épocas a las
actuales, es definitivamente un reto, puesto que la dificultad de integrar
generaciones bajo un lenguaje que les comunique conocimientos es precisamente
un aprendizaje disciplinar, lo cual en diversas oportunidades les permitirá
entender el contexto y a saber afrontar los nuevos cambios del siglo en que se
vive.
Si estas
consideraciones se trasladan al ámbito organizacional, se evidencia que
precisamente estos conocimientos son la base de cualquier ventaja competitiva,
por lo que las organizaciones deben ser sostenibles en cualquier sistema
económico reinante, puesto que se debe aprende a gestionar el capital humano
con que esta cuenta, de manera de hacerla más inteligente y de constantes
desarrollos de conocimientos. Tal como lo comenta Bueno (2000), intentar conocer el Capital Intelectual de la
empresa, de cualquier organización, es importante. En consecuencia, hay que,
primero, identificar los indicadores que explican los componentes de capital
humano, capital estructural (Organizativo y Tecnológico) y capital relacional,
para, después, intentar medirlo.
Prender
a compartir conocimientos, es la base fundamental para el desarrollo adecuado
de cualquier organización, logrando con esto compartir y convivir bajo los
diversos matices culturales y generacionales a los cuales se incrementa el día a día el conocimiento colectivo.
REFERENCIAS
BARRASA,
A., GIL, F., DE LA OSA, J. y ALCOVER, C. (2002): La gestión del conocimiento:
tendencias y desarrollos en España. [Artículo en
línea]. Disponible: http://www.redalyc.org/pdf/2313/231318274010.pdf [Consulta:
2016, Julio 10].
BUENO, E.
(2000): La sociedad del conocimiento: una visión interdisciplinaria e
intrageneracional. [Artículo en línea]. Disponible: http://www.encuentros-multidisciplinares.org/Revistan%BA4/Eduardo%20Bueno.pdf
[Consulta: 2016, Julio 10].
DRUCKER, P.F. (1959): “La revolución educativa” en:
Etzioni A. y Etzioni E. (comp.) (1968): Los cambios sociales. Fuentes tipos y
consecuencias, FCE, México.
MARRERO, A. (2007): “La sociedad del conocimiento:
una revisión teórica de un modelo de desarrollo posible para América Latina”. [Artículo en
línea]. Disponible: http://www.uv.es/~sociolog/arxius/ARXIUS%2017/07.%20MARRERO.pdf
[Consulta: 2016, Julio 10].
Saludos! en la sociedad del conocimiento el reto gira en función de la integración de todos los actores sociales en función de compartir aprendizajes y ser capaces de integrarlos a los diferentes sistemas sociales, económicos, industriales en función de generar valor y crear ventajas competitivas
ResponderEliminarBuenas noches saludos a todos acotando un poco sobre el tema, es necesario que para que el conocimiento produzca valor debe existir la competencia y el compromiso organizativo suficiente para aplicarlo eficiente y eficazmente.
ResponderEliminarBuenas noches saludos a todos acotando un poco sobre el tema, es necesario que para que el conocimiento produzca valor debe existir la competencia y el compromiso organizativo suficiente para aplicarlo eficiente y eficazmente.
ResponderEliminar